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Silvina Garcilazo, hermana de Ivana, afirmó que Damián Reifenstuel está en Santa Cruz de la Sierra, ciudad a la que viajó hace unos días.
En busca de justicia tras el asesinato de Ivana Garcilazo, una hincha de Rosario Central de 32 años que volvía de presenciar el clásico de esa ciudad en el Gigante de Arroyito y recibió una pedrada mortal en la cabeza a pocos metros del estadio de Newell’s, la hermana de la víctima, Silvina Garcilazo, viajó a Bolivia para encontrar al acusado que está prófugo y, al parecer, está obteniendo resultados positivos.
Es eso, al menos, lo que reflejó en diálogo con Telenoche Rosario, donde contó que después de una serie de acciones que llevó a cabo en redes sociales, “el primer dato” que le dieron fue que habían visto a Damián Reifenstuel, el único sospechoso que no está detenido por este caso, “limpiando vidrios en un semáforo” de Santa Cruz de la Sierra.
Dijo, además, que otra compatriota le comentó que “no tenía dudas de que era él” y que otras personas también lo habían visto en esa misma ciudad boliviana, a la que viajó por su cuenta vendiendo incluso objetos personales para repartir “miles de folletos con la cara” del acusado.
“Cuando nos enteramos de que había cruzado ilegal, nos empezamos contactar con mochileros en Bolivia y con gente de acá por diversos medios”, comentó acerca de las razones que la llevaron hasta el país vecino.
Al mismo tiempo, aclaró: “No vinimos a hacernos los Robin Hood, solo queremos que la policía lo detenga”. “Creemos que la gente de Bolivia nos va a ayudar y vamos a dar con este asesino”, agregó.
“Creo en la Justicia, tanto la de Argentina como la de Bolivia, pero es muy lenta y no podemos esperar. Hay que seguir protocolos, pero yo les dije que sabiendo donde está (el prófugo) no me puedo quedar en mi casa durmiendo tranquila”, remarcó.
El asesinato de Ivana Garcilazo
Ivana Paula Garcilazo, murió tras ser impactada con una piedra en su cabeza en la calle Ovidio Lagos, entre Montevideo y Pellegrini, a poco más de dos cuadras del Coloso Marcelo Bielsa. La víctima y su pareja volvían hacia la zona sur de la ciudad, el pasado 30 de septiembre.
Los atacantes lanzaron pedazos de una baldosa hacia la moto e Ivana cayó al suelo. Hasta el lugar llegaron dos ambulancias del sistema de emergencias, pero no pudieron reanimarla.
El novio de la víctima, que tenía una camiseta y la campera de Rosario Central, no sufrió heridas. Ambos volvían de presenciar el partido en el que su equipo le ganó sobre el final a Newell’s por 1-0.
El primer detenido por esta causa fue Ariel Cabrera, un profesor de Educación Física, también hincha de Newell´s, luego se entregó un segundo sospechoso un hombre de 40 años, identificado como J.J.M., en la sede Agencia de Investigación Criminal (AIC) de Rosario.
J.J.M. se había escapado de la escena del crimen, pero había quedado filmado por cámaras de seguridad y había sido visto por varios testigos, entre ellos, entre ellos un taxista que los corrió a él y a Damián Reifenstuel, el profesor de Química que permanece prófugo y que la hermana de la víctima ahora busca en Bolivia.
ES
