Con el Sistema Nacional de Información Hídrica prácticamente caído, la alerta sobre la situación de los dos caudalosos cursos de agua llegan a las poblaciones salteñas de los departamentos Rivadavia y Orán desde organismos del Estado boliviano. En Salta, desde Hito 1 hasta Santa María en la comuna de Santa Victoria Este, se espera la inundación. En Aguas Blancas, el paso de chalanas fue clausurado ayer.
“Estamos sin dormir y esperando la crecida”, relató anoche Antonia Pérez, referente de la Comunidad Misión Anglicana Santa María, una localidad del departamento salteño de Rivadavia que se encuentra al norte del municipio de Santa Victoria Este. “Tenemos un anillo (de contención), dependemos de él. Si se rompe, no sé que vamos a hacer“, agregó con notoria angustia. “El río (Pilcomayo) está muy complicado”, sostuvo.
Pérez contó que ayer miembros de su comunidad trabajaron todo el día para construir una defensa con bolsas con tierra, porque esperan que la crecida ingrese por el norte. Informó también que por ese motivo, hoy permanecerán cerrados y sin clases los establecimientos primarios y secundarios no sólo de Santa María, sino de otras urbanizaciones del Chaco salteño que se encuentran muy cerca de ese curso de agua, como Hito 1, La Curvita, Monte Carmelo y La Puntana, todas poblaciones indígenas.
“Nosotros estamos en nuestras casas, pero sigue lloviendo”, continuó. La referente destacó que necesitan “urgente la ayuda” del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia. “Pedimos urgente el reparto de módulos focalizados en Santa María”, reclamó. Contó que en estas circunstancias optan por no salir a los caminos por temor a una crecida repentina del río. “No tenemos plata para comprar alimentos. Queremos que los manden urgente para que podamos tener alimento ante esta situación”, solicitó. “No podemos salir ni a buscar leña, porque sigue lloviendo”.
Hasta el cierre de esta edición, la Federación de Ganaderos del Gran Chaco en Bolivia, comunicaba que por el desborde del río Pilcomayo en su cuenca baja, la situación de los productores y sus animales era crítica, y que el aumento sostenido del caudal del río estaba afectando gravemente a las comunidades de Cutaiquí, La Victoria, Esmeralda y Villa Montes, todas en el departamento boliviano de Tarija, al norte de las poblaciones salteñas en la comuna de Santa Victoria Este. El Sistema de Radio y Televisión del Pilcomayo informó alrededor de las 21 de ayer que ese gran cauce mantuvo hasta las 18.10 una altura de 4,24 metros. Según el último reporte hidrométrico de la Unidad de Biodiversidad, Conservación y Desarrollo de Fauna (Codefauna) de Villa Montes, se mantenía el alerta roja para ambas bandas de ese río.