Joaquín Fernando Pérez tenía 34 años, estaba casado y tenía una hija de 2 años.
Fuera de las zonas más conflictivas en el mapa de homicidios de Rosario, un arquitecto fue asesinado durante un intento de robo. Murió en los brazos de su esposa, con quien tenía una hija de 2 años.
Según la denuncia policial, lo balearon cuando iba a guardar el auto a la vuelta de su casa y cayó herido frente a la puerta después del asalto.
Joaquín Fernando Pérez (34) murió pasada la medianoche en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). Vivía con su esposa y su hija de 2 años en el barrio de Arroyito, donde algunos vecinos trataron de auxiliarlo cuando lo encontraron en la puerta de su hogar sobre Juan B. Justo al 1700.
“Era mi hijo del corazón. Caminó dos cuadras agonizando. Mi hija lo tuvo agonizando en sus brazos hasta que llegó el SIES. Nadie lo socorrió“, escribió en Facebook su suegra.
El caso generó conmoción y el intendente de Rosario, Pablo Javkin, le dedicó un mensaje: “Es un día muy triste. El de Joaquín no es un asesinato más. Un buen chico, un resiliente que había perdido a sus viejos y seguía estudiando, trabajando, siendo padre…”
Además, envió un mensaje con tono político: “No naturalicemos estas cosas. Si vinieron fuerzas, por favor, que empiecen a cuidarnos mejor”, tuiteó.
La semanas pasada se había hecho la presentación de la primera tanda de gendarmes que desembarcan en Rosario como parte de un plan para tratar de frenar la violencia en la ciudad.
El hecho
Todo ocurrió minutos antes de las 23 del martes. A esa hora, la víctima estaba frente a la cochera sobre pasaje Muñiz al 1200. En ese momento lo abordaron con un arma de fuego y le dispararon varias veces para arrebatarle su Renault Clio.
En paralelo con la huida de los delincuentes, Pérez salió corriendo después de recibir tres balazos: dos en el tórax y uno en la ingle. A la mañana siguiente se veían en la puerta de su casa los rastros de la sangre que perdió por las heridas.
Joaquín Pérez (34), el arquitecto asesinado en Rosario durante un asalto. Foto Facebook
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) precisó que el dueño del auto robado ingresó al HECA en estado crítico y murió a las 00.20, menos de dos horas después del hecho.
La Policía no tardó en encontrar el vehículo después del ataque en la zona norte rosarina. El Clio había sido abandonado sobre el cruce de Flynn y Olivé, a ocho cuadras de la escena del crimen. La ventana del vidrio del conductor estaba destrozada, parte de los cristales quedaron desparramados frente a la cochera.
En el sitio donde quedó detenido el auto secuestraron las llaves del dueño. Adentro del habitáculo hallaron una pistola calibre 40 y la Justicia esperaba el resultado de las pericias para determinar si se trata del arma de fuego con la que mataron a la víctima.
El auto del arquitecto, con los rastros de la violencia. Foto: JUAN JOSE GARCIA.
Vecinas del barrio de Arroyito señalaron que Pérez nació y se crió en la misma casa en la que vivía actualmente con su esposa y su hija. En diálogo con Canal 3, confirmaron que escucharon los disparos la noche anterior y varias personas se acercaron para ayudarlo tras el robo.
En cuanto a la investigación a cargo del fiscal Adrián Spelta, el MPA esperaba el resultado de las primeras medidas para corroborar la mecánica del asalto y determinar cuántas personas participaron en el robo y el asesinato. El auto fue trasladado a la comisaría 10° para hacer pericias.
Debido a la conmoción que generó el homicidio de Pérez, vecinos de Arroyito y otros barrios rosarinos lanzaron una convocatoria en redes sociales para pedir justicia por el crimen. La protesta se organizó para este jueves a las 19 en el cruce de Juan B. Justo y Alberdi, muy cerca de donde vive la familia.